Cómo aislar tu casa para que no te molesten los vecinos
El hogar, ese lugar que te recibe con los brazos abiertos cada día tras una dura jornada laboral. Llegas a casa cansado, te pones cómodo y cuando te dispones a relajarte algo te lo impide. En efecto, hablamos de los molestos y agotadores ruidos de los vecinos.
Existen tres formas de solucionar este molesto problema. Las dos primeras giran en torno a lo mismo, informar al vecino, con educación, de que sus ruidos superan la barrera de lo insoportable. Primero lo harás tú mismo y, después, será el administrador del edificio el que envíe una carta para que pongan coto al ruido.
Como bien sabrás, lo más normal es que esas acciones no sirvan para nada. Es, entonces, cuando llega el turno de hacer cambios en tu casa. De todas las opciones, te presentamos aquellas que puedes realizar tú mismo ¡No te las pierdas!
Antes de desmenuzarte nuestros trucos, se hace necesario explicarte los tipos de ruidos que existen:
El ruido aéreo. Es aquel que se transmite por el aire y se cuela en tu vivienda por cualquier grieta, cañería, enchufe… Ejemplos de ruidos aéreos son esos entrañables ladridos de perro o el llanto a media noche del bebé de turno.
El ruido de impacto. También conocido como tu peor pesadilla, se trata del ruido que se transmite por medio de vibraciones en la estructura del edificio y que, además, es prácticamente imposible eliminar. Hablamos de los taconeos o el arrastre de muebles. Sólo se elimina si el emisor se compra una alfombra o coloca tacos en las patas.
Medidas para reducir el ruido de tus vecinos
Si es aéreo
1. Coloca espuma alrededor de las tuberías de agua.
2. Tapa el hueco de la puerta principal.
3. Forra tus paredes con paneles de yeso (mínimo 5mm de espesor) o coloca un aislante, como lana mineral, y ocúltalo con paneles de yeso laminar.
- Pon falso techo con cámara de aire.
- Cubre tus ventanas de cortinas de tejidos gruesos
- Cuelga en tu pared espejos, cuadros, estanterías o pon un armario. Reparten el ruido y, así, lo mitigan.
Si es de impacto
1. Trabaja tus dotes de persuasión.
Dicho esto ¿A qué esperas para reducir a la mínima expresión los ruidos de tus vecinos?
Fuente: vivienda saludable