Con las cápsulas del tiempo puedes capturar eventos y momentos especiales, guardarlos en un sitio seguro y recuperarlos años después para recordar aquellos maravillosos años. Hacer tu propia cápsula del tiempo es un DIY muy sencillo y rápido siguiendo estos pasos:

1. Elije un contenedor como cápsula del tiempo

Dependiendo de donde vayas a guardar tu cápsula del tiempo tendrás que elegir un contenedor adecuado. Si la vas a enterrar es mejor optar por algo resistente, que no deje pasar demasiada humedad, como un tarro de conservas o una botella que se pueda cerrar herméticamente. Si vas a guardar la cápsula en casa puede ser cualquier otro contenedor, desde una caja de zapatos, sobres o una lata.

2. Llena la cápsula del tiempo con recuerdos

Mete en la cápsula todo los recuerdos que quieras conservar y recordar dentro de muchos años. Recortes de periódicos, fotos, entradas de eventos, cartas, ropa, trofeos, etc.

3. Esconde o entierra la cápsula

Puedes enterrar la cápsula del tiempo en el jardín o esconderla en algún sitio de la casa. Es la mejor forma de olvidarse de ella y evitar la tentación de abrirla al poco tiempo. Si la escondes llegará un momento que la olvides, y dentro de muchos años haciendo limpieza, o una mudanza, la encontrarás de casualidad.

Si la entierras en el jardín recuerda exactamente dónde, por ejemplo haciendo una foto y marcando el punto exacto. Si la entierras fuera de casa tendrías que apuntar las coordenadas GPS para poder encontrarla pasados los años. En ambos casos, guarda la foto o las coordenadas GPS en algún álbum antiguo, así cuando algún día lo ojees para recordar, lo encontrarás y podrás desenterrar la cápsula.

¿Qué tipos de cápsulas del tiempo hay?

Hay varios tipos de cápsulas del tiempo, y se suelen guardar recuerdos como bodas, nacimientos, días especiales, vacaciones y otras ocasiones importantes. Aquí tienes algunas ideas para ayudarte a empezar.

1. El año del nacimiento

Si quieres hacerle una cápsula del tiempo a tu bebé, puedes guardar sus primeras prendas de ropa, fotos de recién nacido, un periódico del día en que nació, etc.

2. Las vacaciones y viajes

Por la luna de miel, unas vacaciones especiales o por cada viaje puedes hacer una cápsula del tiempo. Se suelen guardar fotos, mapas, billetes de avión, postales, etc.

3. Etapas de la juventud

Puedes hacer cápsulas del tiempo por la etapa de la EGB, de la ESO, de Bachillerato, de la Universidad, de tu primer trabajo, de tus victorias en el deporte que practicas, etc.

4. Cápsula del tiempo anual

El día de tu cumpleaños rellena una cápsula del tiempo con recuerdos de todo el año que has pasado y guárdala hasta el próximo cumpleaños, y escribe una lista de los propósitos para el siguiente año. Las cosas que te gustaría hacer, nuevos retos, cosas a mejorar, etc,  seguro que cuando la abras te llevas alguna sorpresa y alguna sonrisa.

5. Historias de amor

Puedes hacer una cápsula del tiempo con los momentos mágicos que pasas con tu pareja, desde el día que os conocisteis hasta el día de la boda, y abrirlo cuando celebréis el 25 aniversario de casados. ¡Es súper bonito!

En cambio, si lo que quieres es decorar con recuerdos y fotos, puedes visitar la sección DIY – Hazlo tu mismo para ver un montón de manualidades muy bonitas.