Las humedades son un quebradero de cabeza, primero porque muchas veces no sabes de donde vienen, segundo porque hay que eliminarlas ya que pueden ser nocivas para la salud, y tercero porque si no se soluciona el problema reaparecen. A veces solucionar el problema consiste en abrir la pared para reparar una tubería que pierde agua, así que además de poco agradable es caro.

No hace falta comentar que tener un seguro de vivienda que se encargue de toda la reparación es básico. No solo para librarte de tener que hacerlo tú, sino porque ellos corren con los gastos, que depende cuál sea el desperfecto pueden ser considerables.

Así que en el artículo de hoy vamos a ver ideas de decoración para cuando ya está solucionada la humedad. Veremos cómo pintar las paredes para que no vuelvan a salir, cómo colocar los muebles para que corra el aire y cómo disimular las que ya están empezando a salir pero son de condensación y no se pueden reparar.

Pinta la zona con pintura antihumedad

No vale la pintura normal de las paredes, para una zona donde ha habido humedades hay que usar pintura especial. La diferencia es que tiene propiedades impermeables para evitar que la pared se humedezca con la condensación y aparezcan las temidas manchas.

Se encuentra en cualquier tienda de pinturas o bricolaje. Si les comentas tu problema te podrán asesorar, porque hay diferentes tipos dependiendo del origen y de la habitación.

Por ejemplo, para el garaje se recomienda una impermeabilizante por si hay fugas, para el baño o la cocina se recomienda una antimoho para evitar la condensación, mientras que en el resto de la casa puede valer con una antimanchas si la humedad no es por fugas.

Crea flujos de aire para mantener secas paredes y techos

Una vez te has librado de la mancha de humedad y has pintado con la pintura específica, seguro que no quieres volver a verla. La mejor solución en estos casos es mantener las paredes secas y esto se consigue creando flujos de aire.

No pongas muebles que puedan bloquear la corriente entre las entradas de aire y la zona de humedad. Explicado así quizá no se entiende, pero es tan sencillo como ponerte delante de la ventana y que puedas ver donde estaba la humedad, que no haya nada que te tape la vista por completo.

Si esto no puede ser, pon un ventilador de techo que ayude a mover el aire. Gastan poco y en verano además se agradece su brisa.

En el baño es más complicado, porque el mío por ejemplo no tiene ventana y me salen humedades en el techo. Lo que hago es dejar la puerta abierta mientras me ducho y cuando hace mucho frío enciendo un calefactor de aire caliente.

Noté una gran diferencia con el calefactor. Lo cierto es que no lo compré por las humedades, sino para no encender la calefacción de toda la casa cuando me ducho por las mañana. Pero a partir de ese momento dejaron de aparecer porque el aire caliente sube y mantiene seco el techo.

Disimula las manchas con la decoración

Cuando la mancha es de condensación puede ser que venga del exterior o del interior de la vivienda. Las del exterior es por un mal aislamiento de la fachada, lo que hace que se filtre la condensación del exterior y acabe afectando a las paredes interiores. Las del interior es por la propia humedad del ambiente, ya sea por escasa ventilación, por la ducha o por los vapores de la cocina.

Si estas humedades son pequeñas las puedes disimular con la pintura antimanchas de humedad. Si son grandes o profundas tendrás que llamar a tu seguro para que encargue.

Pero mientras tanto puedes disimularlas:

• Si son en una esquina: Coloca muchas plantas de diferentes formas, tamaños y colores. Si es la esquina superior ponlas colgadas del techo. Con tanto cambio de forma y color la mancha pasa totalmente desapercibida.
• Si son en medio de una pared: Puedes colgar un cuadro con las tiras adhesivas sin clavos, aunque ten en cuenta que esto es una solución temporal por si viene gente a casa o cualquier cosa. Tener un cuadro tapando una humedad la va a empeorar.
• Si son en el techo: Aquí la cosa se complica, lo único que puedes hacer es intentar mantener el foco visual abajo. Por ejemplo, si tienes lámparas de techo bonitas cámbialas por unas más sencillas para que nadie mire arriba.

Espero que estas ideas te hayan ayudado a mantener a raya las molestas humedades. Recuerda pintar la zona con pintura para humedades una vez hayas solucionado el problema, mantener la zona bien ventilada y si vuelven a aparecer disimúlala mientras los expertos encuentran el foco.