Pasamos muchas horas al día en la oficina, seguramente el lugar donde más tiempo estás durante la semana si no cuentas las horas de sueño. Por eso, es importante crear un espacio agradable y cómodo. Hace años la imagen que teníamos de un despacho era un sitio sobrio y formal, pero hoy en día hay muebles de oficina súper bonitos y funcionales para trabajar a gusto.

Trabajar a gusto y cómodos es primordial, porque si no estás bien te acabas agobiando y si adoptas posturas incorrectas con los años llegan los dolores de espalda, de hombros y de piernas. A parte de una buena mesa, lo más importante son las sillas de oficina diseñadas para adaptarse a tu tamaño, al tamaño de la mesa y también a los gestos habituales del trabajo en oficina.

Cómo decorar una oficina moderna y ergonómica

Vamos a ver 5 claves que convertirán tu despacho en una oficina de diseño moderna, teniendo en cuenta las últimas corrientes sobre ergonomía en el trabajo.

Muebles de diseño

Si tus clientes visitan la oficina es importante una decoración a la última, las personas que van a darte su dinero quieren comprobar que no se equivocan. Tienen que saber que estás actualizado y que las cosas te van bien, si ven muebles baratos de otras épocas quizá les entren dudas.

El estilo y los colores los tienes que adecuar a tu público objetivo, no van a ser los mismos muebles para una notaría que para una startup tecnológica. En el caso de las mesas y las sillas de visita, puedes darle prioridad al diseño antes que a la ergonomía.

Sillas ergonómicas

Lo más importante y donde no hay que mirar el precio es en las sillas donde vas a estar horas trabajando. Una buena silla ergonómica te va a durar décadas y va a conseguir que tras una larga jornada laboral te levantes sin molestias.

Las hay por más de 500€, como la famosa Mirra de Herman Miller, que puede parecer un precio elevado pero si lo divides entre 10 años son 50€ al año, lo que equivale a 4€ al mes. Eso no es nada por sentarse en una de las sillas de oficina mejor valoradas.

Estilo industrial

La decoración de estilo industrial llegó de Estados Unidos y es un recurso increíble para la decoración de oficinas. Se basa mucho en mesas de madera veteada y estructuras de metal tipo vintage, combinados con muebles de diseño moderno.

Lo bueno de este estilo es que los desperfectos parecen parte de la decoración. Mantener una oficina impoluta si hay movimiento de gente a veces es complicado, cosa que se soluciona con la decoración industrial.

Espacios abiertos

Eso de trabajar en zonas separadas hace años que pasó a la historia, ahora lo más eficaz es tirar las paredes y trabajar todos en un gran espacio.

Con esto se consigue mejorar la comunicación entre empleados, mejorar el acceso al jefe que ya no está encerrado en un despacho y eliminar sensaciones de claustrofobia.

Muchas veces es necesaria una zona de reuniones privada, y lo que se hace es colocar una pared de cristal para que ninguna de las partes moleste a la otra. Así no restas espacio visual y de cara a los clientes ver cómo trabajan los empleados aumenta la confianza.

Zona Chill Out

Está demostrado que el estado de ánimo influye en la productividad, por eso cada vez más se ven zonas de relax donde los trabajadores pueden desconectar para recargar pilas. También son geniales para reuniones de equipo, porque salir del ambiente de trabajo ayuda a que el cerebro se relaje y piense sin tanta presión, lo que aumenta la creatividad para solucionar problemas.

Colocar Pufs, sofás Chill Out, rodear la zona con plantas, poner bancos con mesas de picnic, incluso algún futbolín o mesa de billar. Aunque no es habitual, hoy en día también se pueden considerar muebles de oficina.