¿Tienes puertas de madera blancas en tu casa que necesitan un buen limpiado? Si es así, a continuación tienes una guía sobre cómo limpiar puertas de madera blancas con los productos recomendados y el paso a paso.

Al final del artículo, también te dejo una lista de productos prohibidos y qué cosas dañan las puertas lacadas en blanco al limpiarlas.

¿Qué necesitas?

Cuando vayas a empezar a limpiar, asegúrate de tener todo lo que necesitas.

• 1 taza de bicarbonato de sodio
• 1/2 taza de vinagre blanco de limpieza (no es el vinagre de cocinar)
• 1/4 taza de agua tibia
• 1 cuchara pequeña de jabón líquido para lavar platos (el Fairy)
• Un recipiente para mezclarlo todo
• Paño limpio o plumero
• Paño limpio o esponja suave
• Guantes (opcionales)

Paso 1: Retira la suciedad y el polvo de las puertas con un paño suave o un plumero

Antes de limpiar bien las puertas frotando para sacarles brillo, hay que pasar un paño húmedo o un plumero para quitar el polvo o cualquier residuo que pudiera haber. Esto es necesario hacerlo porque al frotar, si quedan motas de polvo o restos como arena, el lacado blanco se puede rayar.

Paso 2: Mezcla los ingredientes

Primero, mezcla el bicarbonato de sodio, el vinagre blanco y el agua tibia en un recipiente. Luego, añade el jabón líquido para lavar platos y mezcla hasta que esté disuelto del todo.

Paso 3: Aplica la solución

Ponte los guantes y empapa otro paño o la esponja en la solución. Luego, frota las puertas con suavidad por toda la superficie.

Paso 4: Enjuaga las puertas

Usando agua limpia tibia, enjuaga las puertas para quitar la solución de limpieza que has aplicado. Asegúrate de enjuagarlas bien para que no queden manchas.

Paso 5: Seca las puertas

Por último, con un nuevo paño limpio seca las puerta y quita el exceso de humedad. Deja que se sequen del todo antes de tocarlas para que no queden huellas marcadas.

Productos prohibidos y cosas que dañan las puertas al limpiarlas

Es importante recalcar que hay ciertos productos que no se deben usar para limpiar puertas de madera blancas, o cualquier tipo de madera pintada o lacada. Estos productos pueden estropear la superficie y provocando una decoloración irreparable.

Los productos no recomendados incluyen:

• Limpiadores abrasivos (por ejemplo, detergentes en polvo)
• Limpiadores químicos fuertes (por ejemplo, lejía o amoniaco)
• Cualquier cosa que sea abrasiva (por ejemplo, papel de lija)
• Paños raspadores (por ejemplo, estropajos)
• Cualquier utensilio que pueda rayar la superficie (por ejemplo, cuchillas afiladas)
• Productos que no se hayan probado antes en un área pequeña y escondida de la puerta para asegurarse de que no estropean la superficie.

También es importante evitar frotar demasiado fuerte aunque uses esponjas suaves, ya que también podría rayar o dañar la superficie de la madera pintada o lacada.

Sigue estos 5 pasos fáciles y podrás disfrutar de tus bonitas puertas blancas como nuevas durante años. Si tienes alguna pregunta sobre cualquiera de los pasos coméntanoslo en los comentarios y estaré encantada de ayudarte con consejos adicionales.

También puedes ver la guía sobre cómo limpiar puertas de madera muy sucias con el paso a paso para que queden como nuevas.

Recuerda, siempre es mejor prevenir que curar, así que si tienes dudas sobre qué productos usar o cómo proceder, aquí estamos para ayudarte.