Hacía tiempo que quería comprar un sillón de relax para el salón. Me gusta leer, y siempre va bien tener un rincón donde sentarte cómodamente con un buen libro. El sofá también es agradable, pero necesitaba un espacio individual para centrarme mejor.

Quizá hace un tiempo, un sillón se relacionaba inconscientemente con algo pasado de moda, un mueble que utilizaban nuestros abuelos porque no era tan habitual tener sofá. Y lo cierto es que estéticamente no eran demasiado bonitos, excepto los de diseño, pero se iban mucho de precio.

Desde hace algunos años los diseños se han modernizado, y a día de hoy hay sillones de relax muy bonitos y actuales, a precios para todos los bolsillos.

Éste es el mío, el sillón modelo Málaga en color negro con las patas de madera. A primera vista parece uno mas, pero el hecho de que tenga las patas en madera con esta forma tan bonita lo hace diferente al resto, y le da un aspecto muy actual.

Combina el estilo clásico de los sillones de cuero, con matices modernos de hoy en día, lo que consigue un toque vintage ecléctico que me gusta mucho. Además el Puf para los pies hace que sea súper cómodo y relajante.

Es reclinable, se puede poner el respaldo totalmente derecho, o prácticamente horizontal. Por lo que es perfecto para leer, ver una serie, echarse una siesta, o reposar tumbada después de un duro día.

Algo que me gusta, es que tiene un pequeño bolsillo en el lateral, para poner el mando de la tele, guardar el libro, o cualquier cosas que vayas a necesitar mientras descansas.

El material del que está tapizado es piel sintética 100% PU, de una calidad bastante alta para el precio que tiene el sillón. La desventaja es que no se puede comparar a la piel auténtica. La gran ventaja es que se lava muy fácil, y no necesita mantenimiento para conservarla en buen estado.

Las patas son de madera natural, y la verdad que me gustan mucho. Creo que me decidí precisamente por las patas, puede parecer una tontería, pero le dan un toque cálido y nórdico, a la vez que moderno.

Sillas de comedor a juego

Tras la buena experiencia con el sillón, estoy pensando en comprar unas sillas de comedor baratas que vayan un poco a juego. Toca renovar las mías y estoy viendo algunas muy bonitas.

Éstas por ejemplo, aunque no lo son, parecen de la misma colección. La silla en negro con acolchado de cuero, y las patas en madera. Este diseño me gusta mucho y le da un aire súper ecléctico a cualquier habitación.

Y ya que estamos, también me gustaría cambiar la mesa del comedor. Siempre me han gustado las de madera maciza, robustas y fuertes, de aspecto rústico. En una cafetería vi una que me encantó, se parecía mucho a la idea que tengo en la cabeza, pero al final no pregunté dónde la habían comprado.

Hoy en día por poco dinero se le puede dar un giro a la decoración de cualquier estancia. Gracias a las tiendas de decoración online tenemos acceso a muebles con precios muy ajustados, impensables hace unos años. Además, con diseños preciosos y variedades imposibles de encontrar en tiendas físicas.

Cuando pierdes el miedo a comprar muebles por internet se te abre un nuevo mundo de posibilidades. Más barato, te lo traen a casa, y tienes 14 días para devolverlo si no te gusta.

Estoy contenta con el sillón de relax Málaga, por el precio que tiene se ve de buena calidad y tiene presencia. Ahora solo me faltan las sillas de comedor y la mesa rústica para tener un comedor nuevo 🙂